Pablo de Tarso es conocido como San Pablo y es conocido como el “Apóstol de los Gentiles”. Es el responsable de la fundación de las primeras comunidades cristianas en Asia y Europa. Los viajes de San Pablo son 4 aunque el último de ellos ya fue en cautividad en su traslado a Roma donde fue juzgado y decapitado.
San Pablo nación solo unos años después de la crucifixión de cristo y murió en Roma en torno al 65 d.C. Se le conoce como el Apóstol de los Gentiles o el Apóstol de las naciones puesto que su labor evangelizadora fue muy extensa por zonas del Sur de Europa y de Asia.
San Pablo, fundador de comunidades cristianas
Es el fundador de algunas de las primeras comunidades cristianas en especial en centros del imperio romano como Roma, Éfeso, Corinto o Antioquía. Por eso se le considera una de las figuras más importantes en el cristianismo y uno de los que impulsaron su crecimiento y extensión.
Fue el responsable de la creación de algunos de los primeros centros cristianos y promovió la figura de Jesucristo tanto a judíos como a gentiles.
Pablo fue un pionero en la expansión del cristianismo dentro del Imperio romano a pesar de no ser uno de los 12 apóstoles.
Su pensamiento dio forma al cristianismo paulino, una de las principales corrientes del cristianismo primitivo que influiría en el canon bíblico.
Los viajes de San Pablo
San Pablo realizó tres cuatro viajes principales conocidos como los viajes de San Pablo por Grecia y Turquía. Si bien el último fue como prisionero de los romanos para ser trasladado de Jerusalén a Roma y ser juzgado.
Los viajes de San Pablo se desarrollaron principalmente por Turquía, Grecia y Roma. En especial en la región de Anatolia.
Primer viaje
San Pablo inició su misión evangelizadora en Damasco y Arabia, y en el año 40 se dirigió a Jerusalén, donde conoció a San Pedro y a Bernabé. Bernabé fue a buscarlo a Tarso para llevarlo a Antioquia, donde ambos pasaron un año evangelizando.
Este lugar se convirtió en un centro primordial para los cristianos conversos del paganismo y fue en Antioquia donde se usó por primera vez el término «cristianos» para referirse a los seguidores de Jesús.
Este período de doce años (45-57) representó la etapa más activa de su vida, incluyendo tres grandes expediciones misioneras que siempre iniciaban en Antioquia y concluían con una visita a Jerusalén.
En su primer viaje misionero, partieron de Antioquia hacia el puerto de Seleucia y de allí se embarcaron hacia Chipre, desembarcando en la ciudad de Salamina donde predicaron brevemente.
El segundo viaje de San Pablo
El segundo viaje, entre los años 49 y 52, San Pablo revisó las iglesias fundadas en el primer viaje y se propuso continuar su misión en Asia Menor, pero se dirigió hacia Europa.
Acompañado por Lucas y Timoteo, llegó a Filipos donde liberó a una joven de un espíritu de adivinación, lo que provocó la ira de quienes se lucraban con ella, resultando en la prisión de Pablo y Silas.
En Atenas, se encontró con el escepticismo al predicar sobre la resurrección, pero logró algunas conversiones antes de dirigirse a Corinto, donde pasó dieciocho meses y estableció una próspera comunidad cristiana.
El tercer viaje
El tercer viaje, del 53 al 56, fue destacado por su estancia en Éfeso, donde persuadió a muchos de abandonar el culto a la diosa Diana, lo que provocó la ira de los artesanos locales.
Finalmente, San Pablo se dirigió a Jerusalén con donativos para los cristianos necesitados, advirtiendo a sus seguidores sobre los peligros que enfrentaría.
El cuarto viaje
En su último viaje a Jerusalén, enfrentó una severa persecución. Tras ser rescatado por soldados romanos, fue trasladado a Cesarea, donde permaneció preso dos años.
En Roma, estuvo bajo arresto domiciliario, aprovechando para predicar sobre Cristo. Su vida terminó con su martirio durante la persecución de Nerón, siendo decapitado en un lugar que posteriormente se conocería como Tre Fontane, donde surgieron fuentes de agua donde cayó su cabeza, según la tradición.
La figura de San Pablo
San Pablo también es responsable de una extensa comunicación a través de cartas dirigidas a las distintas comunidades, especial a las de Anatolia como son las famosas Cartas a los Efesios o a los Gálatas.
Por esta extensa labor viajando y fomentando las comunidades cristianas iniciales a San Pablo se le considera una de las figuras fundamentales en la expansión del cristianismo.
La ruta de los viajes de San Pablo
Los viajes de San Pablo cubrieron zonas muy extensas que es casi imposible replicar hoy en día. Dedicó muchos años a esta labor de fundar comunidades cristianas por toda Europa y Asia.
Recorrió zonas como Tierra Santa, Grecia, Chipre, Turquía y Roma donde encontró la muerte.
Una de las más populares es la que recorre la península de Anatolia en Turquía pasando por Estambul. Una de las ciudades con más habitantes del mundo y cuna de una de las comunidades cristianas más importantes de la antigüedad.
Recorrer las rutas de los viajes de San Pablo son un viaje de peregrinación, pero también un viaje a través de la historia siguiendo los pasos de una de las figuras más importantes del cristianismo como es Pablo de Tarso.
Viajes de San Pablo por Turquía
San Pablo, originario de Tarso en la península de Anatolia, hoy territorio de Turquía fue un pionero en la expansión del cristianismo.
Es famosa su correspondencia con los habitantes de Éfeso y Colosas, donde los exhortaba a seguir a Jesús y mantener firme su fe.
En tierras turcas se celebraron importantes concilios ecuménicos, como los de Nicea, Constantinopla, Éfeso y Calcedonia.
La ruta de San Pablo ofrece un recorrido extraordinario por dos naciones profundamente arraigadas en la historia antigua: Turquía y Grecia.
Desde la histórica Anatolia hasta los emblemáticos yacimientos arqueológicos griegos, este viaje promete ser una experiencia transformadora.
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